Diana de Guilarte
Aquí que luz tan extraña,
quien hace luz es un dios.
Y este pico vuelve dos
la luz madre en la montaña
Doble juego, doble hazaña,
proximidad, lejanía,
plástica luz, luz poesía,
prima materia del arte,
en la silla de Guilarte
está levantando el día.
.
El sol se sienta en la silla
deshojando un girasol,
haciendo toda arrebol,
toda la tierra amarilla.
Flor de majagua sencilla,
de canario sideral,
conspiración natural
del color con la alegría.
Ya está comandando el día
su Guilarte general.
Ese levante de flamas,
ese motín de fulgores,
la insurrección de colores,
cielo y tierra envuelta en llamas.
Monte que grita, en sus ramas
filos de luces reparte.
Fue aquí que el rayo de Marte
estrenó el machete un día.
Y en medio de la gritería
nació la aurora en Guilarte.