Las doradas colinas de Binh Thuân
Rolando Alarcon
El joven héroe tendido
junto a su fusil,
sus ojos fijos en lo que antes fue
la dorada colina de Binh Thuân.
Allí el trigo y el arroz,
crecía en abundancia.
Ahora sangre riega flores
que perdieron su fragancia.
Ahora nube, polvo y hambre
sobre el cielo de Viet Minh.
La vida va triunfante ante la muerte
y el futuro germinando para ti.
El cañón ahora truena
las doradas colinas de Binh Thuân,
y la flecha de bambú surca doliente
reclamando la ansiada libertad.