Cosas Que Jamás Diría a Nadie

KYOTTO, Rele

Me duele tan dentro que ya no sé ni lo que siento.
Me haces tanto bien si te pienso, haces tanto mal si te tengo que…
Conozco ese cuento de “si me voy ya nunca vuelto” y sé
tanto de ti que estás mintiendo, tan poco de mi que no entiendo.

Si yo nunca hablo con extraños, corriendo en dirección contraria.
Quizá sea el paso de los años o que me come la nostalgia.
Será que me pierdo en tus labios, será que me ganó tu labia,
me duele tanto que me callo, me curas tanto si me callas.

Un puñal en mi pecho, me mira raro el del espejo,
como si fuera más guapo, más triste, más solo y más viejo.
No solo el oro reluce, mira mi alma es puro reflejo,
que ya no sé ni qué color tengo, solo puedo ver el del resto.

Dos niños en un cruce, tus ceras de color, mi estuche.
Daño de canción favorita, no me cansa, me duele en bucle.
Tus ojos me gritan: El mundo odia lo que reluce.
Y a mi me odian como me aman y me aman como yo no supe.

Ven y vamos a querernos como si na’ de esto doliera,
vamos a empañar mi ventana e ignorar lo que pasa ahí afuera,
a correr bajo la lluvia y saltar en los charcos que hay sobre la acera.
Juro volver esto eterno si tu me juras que te quedas.

(Si tu me juras que te quedas)

Me la juego si te la juegas.
Tallar mi nombre en la madera, escaparme del mundo como si pudiera.
Beber sin vergüenza tirado en la acera. Mis lagrimas como bandera y un par de monedas.
Una foto vieja que me recuerda lo que no era,

y lo que nunca fui, cualquier color parece hermoso cuando el día es gris,
si todo esta mal, esa cicatriz que recuerda y no deja olvidar.
Si aún sabes de mi, sabrás que ya no soy el mismo tras verle partir.
Tu boca y mil cosas que no quiero oír, porque vuelves triste a este pobre infeliz.

Y me atiendes sin escucharme, recordé que debía olvidarte.
Debiste advertirme desde mucho antes “que nadie toca el pecado sin mancharse”.
La gente me mira y pobres ignorantes… No saben amar sin dañarse.
Y quizá yo tampoco sepa y resulte tan fácil malacostumbrarse.

Tiran piedras y pecados, desconfiar, mirar mal al de al lado.
Destacando incluso en la noche de gatos pardos con rasgos atigrados.
Solitario, mal acompañado. Procedencia un lugar muy lejano.
Padre de todos, pero hijo de nadie. Condenado a ser olvidado.

Condenado a ser olvidado, condenado a ser olvidado y ya.
Condenado a ser olvidado, condenado a ser olvidado…

Escapemos juntos, ropa y amor de mercadillo,
con un par de euros y algo de suerte en los bolsillos.
Empeñar mis sueños, te ahogas en mis ojos de vidrio.
Tan frío y tan muerto a par que risueño como un niño soy

soledad y hambre, oso hormiguero en este enjambre.
Oliendo a colonia barata, con un amor incalculable.
Te aparto la vista, no busques no vas a encontrarme…
Te canto al oído dormida cosas que jamás diría a nadie.

Cosas que jamás diría a nadie…
Te canto al oído dormida cosas que jamás diría a nadie.
Cosas que jamás diría a nadie...

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